Thomas Edison patentó el fonógrafo en 1878. Las primeras grabaciones fueron capturadas en cilindros de cera y reproducidas en fonógrafos como éstos. La bocina era una gran trompeta de "Mañana de gloria", llamado así porque se parecía a una flor. Nueva forma de entretenimiento en casa: la música en vivo fue popular en los hogares durante el siglo 19. Mientras que una persona tocaba un órgano, un piano o un instrumento de cuerda, el resto de la familia cantaba. La invención del fonógrafo condujo al declive de la música casera en vivo. Las familias comenzaron a comprar música grabada para escucharla. En 1904, casi uno de cada cuatro hogares estadounidenses poseía un fonógrafo.