Debido a su belleza, Bellagio fue uno de los primeros lugares de Italia en convertirse en un destino turístico internacional y aún conserva el aire distinguido que le dan sus pequeños callejones y tiendas tradicionales.
A lo largo de los siglos, su estratégica posición en el centro del lago confirió a Bellagio una gran importancia a Bellagio que, por ese motivo, fue siempre muy disputado.